Deportivo Alavés
El Alavés, campeón de Segunda
-
El empate ante el Nastic permite a los vitorianos proclamarse campeón de Liga por segunda vez de la división de plata
El Deportivo Alavés es campeón de Segunda División. Como en 1998. Entonces con Mané, con 82 puntos; ahora con Bordalás, con 75. Un título merecido para el equipo más regular de la categoría de plata, el mejor, el que antes selló un ascenso en el que le acompañará el Leganés tras su triunfo en Miranda. Un equipo que compite casi sin querer, hasta cuando no se juega nada, como este sábado, solo el orgullo, de lo que va sobrado, además de un buen pellizco económico para las arcas de Mendizorroza. Quizás sin la intensidad habitual, pero con toda la seriedad y profesionalidad para sacar el punto necesario en la visita a un Nástic más enchufado y dominador por sus urgencias (1-1). Se han adelantado los granas mediada la segunda mitad en un saque de esquina, pero el conjunto vitoriano quería ser campeón y lo ha conseguido gracias al empate conseguido por Manu Barreiro en el minuto 89, también a la salida de un córner. La guinda a una excepcional temporada.
El inicio del partido ha tenido claro color grana. Mandaba el que se jugaba más. El Alavés, con varias caras no habituales en su alineación, serio, pero sin la mordiente habitual en su presión y una defensa más destensada, circunstancia que ha aprovechado el Nástic para empezar a crear peligro. Aníbal ha disparado al poste (m. 10) y un gran Pau Torres, novedad en la portería vitoriana, ha evitado después el gol catalán con tres buenas intervenciones, especialmente en un mano a mano con el incisivo Emaná (m. 17), tras un error defensivo de Aritz Borda. Pero el asedio local ha ido bajando de nivel según avanzaba el cronómetro y el conjunto albiazul se ha sacudido ese dominio mediada la primera mitad. Sin crear peligro, pero los babazorros han adelantado líneas y han alejado a la escuadra tarraconense de su área para llegar al descanso con empate a cero en el marcador.
En la segunda parte el Nástic ha salido menos efusivo, pero las mejores ocasiones han seguido siendo suyas. Una falta directa de Naranjo fuera (m. 53) y, sobre todo, un disparo a bocajarro de Jean Luc que Pau Torres ha salvado de manera milagrosa (m. 64), con tiempo incluso para reaccionar al posterior disparo de Emaná y enviarlo a córner. Excepcional doble intervención del portero albiazul. El preludio del gol grana, a la salida del saque de esquina, en un inapelable remate de cabeza de Molina. Quedaban 25 minutos, pero a partir de ahí el conjunto de Vicente Moreno, como ya hiciera en Mendizorroza, se ha dedicado a parar el partido y frenar el juego con continuas pérdidas de tiempo y jugadores tirados en el suelo. Quizás luego se haya arrepentido. El Alavés se ha estirado entonces a por el empate que le hiciera campeón, pero no ha inquietado en exceso la portería de Reina. El duelo se dormía, mecido por el Nástic. Hasta el minuto 89, cuando Barreiro ha rematado a gol un córner botado por Juli y, apoyado en una nueva buena intervención de Pau Torres en el descuento, ha hecho merecidamente campeón de la categoría de plata al conjunto de Bordalás.
Directo
Temas