El uno a uno del Alavés - Celta: el Pere Pons más activo

Poco pudo hacer en los goles, despistado por un rebote en el primero y apuntillado después en el rechace de un penalti, mal tirado, que detuvo a Aspas. Buena intervención ante Galhardo para evitar el tercero.

Bien en sus duelos con los dinámicos atacantes celestes, aunque la zaga albiazul sufriera con el ingenio ofensivo de Iago Aspas. Estuvo cerca de sacar sobre la línea el primer gol gallego.

Sólido, contundente y sin lagunas defensivas, aunque fuera desafortunado protagonista del primer gol al desviar el tiro de Santi Mina. Vio la amarilla por una fuerte entrada a destiempo a Aspas.

El canterano firmó un buen partido en líneas generales, con protagonismo ofensivo y firmeza defensiva, pero quedó marcado por la ingenuidad del penalti, en una acción en la que saltó a taponar un centro con el brazo abierto.

En su línea de sólido y contundente trabajo oscuro. Serio y expeditivo atrás, también brindó su apoyo en ataque –probó fortuna en la primera parte–. Vio la quinta amarilla, que le impedirá jugar el viernes en Granada.

Su exuberancia física le convierte en una pieza indispensable en las labores de contención y estuvo más preciso con la pelota que en citas previas. Rozó el gol en el arranque de la segunda mitad, con un cabezazo al palo.

Notable partido del atalán, que añadió protagonismo ofensivo a su habitual actividad constante sin balón. Atisbó el desmarque de Edgar para iniciar la jugada del gol albiazul, condujo el balón con mucho criterio y se asomó al área contraria.

El centrocampista extremeño es una pieza fundamental en el centro del campo albiazul, al que dota de mucho equilibrio con y sin balón –más adelantado en la presión–, aunque tuvo menos protagonismo que en otros partidos.

Empezó el partido en la izquierda y acabó en la derecha. Intermitente en sus acciones, pero importante. Desmarque de ruptura y buen servicio al área en el primer gol y apariciones peligrosas cerca del área rival. Tuvo una ocasión en la segunda mitad.

Más irregular en su amenaza que en partidos anteriores, pero siempre genera cosas. Le costó más aparecer desde la derecha, aunque resultó decisivo en el gol con una prolongación de cabeza. Más entonado en los buenos minutos colectivos de la segunda mitad, ya en la izquierda.

Otro día más en la oficina de la productividad del gallego, que ha convertido su gran rendimiento en rutina. Gol de delantero para hacer historia y muchos recursos de producción ofensiva para elevar a otro nivel el ataque alavesista.

No encontró su sitio sobre un césped complicado por las inclemencias del tiempo.

El único cambio que tuvo incidencia en el juego. El asturiano se adueñó del balón para dar criterio al ataque alavesista.

Acelerado y sin relevancia en el tramo final.

Se entretuvo demasiado en un balón suelto que se encontró en el área rival.

Sin apenas tiempo e impreciso.